Leí en redes buenas críticas sobre esta novela y me animé a comprarla. Entre otros, le había gustado a Toni Hill ( y lo que diga Toni Hill va a misa). Me ha gustado mucho. Es un paisaje de montaña al norte de Italia, una tierra con un aspecto mágico. Aparece el cuerpo de un hombre asesinado al que le han sacado los ojos. El cadáver ha sido dispuesto de una forma extraña y a la comisaria Teresa Battaglia le da el pálpito de que puede ser el inicio de una serie de crímenes. El joven inspector Massimo Marini acaba de incorporarse al equipo de Battaglia y, haga lo que haga, no consigue obtener la aprobación de su jefa. Un caso duro y complicado donde dan tanta pena las víctimas como el asesino, un escenario perfecto y buenos personajes. Buen crimen invernal.
