 En caso de duda, un Andreu Martín siempre está bien. Creo que no he leído ninguna novela suya que no me haya gustado. Esta es una novela dura, trata uno de los delitos más repugnantes del mundo: la trata de niños. Pero hay muchas más cosas: cuándo está justificada la violencia, qué huellas llevan las víctimas o qué estarías dispuesto a hacer por alguien a quien amas. Tiene dos narradores que se van alternando: Alexis Rodón, un exmosso expulsado por maltrato a un sospechoso, y Teresa Olivella una mujer que arrastra un pasado terrible e intenta sobrevivir con una máscara de payasa. Como siempre, Andreu Martín es un maestro.
En caso de duda, un Andreu Martín siempre está bien. Creo que no he leído ninguna novela suya que no me haya gustado. Esta es una novela dura, trata uno de los delitos más repugnantes del mundo: la trata de niños. Pero hay muchas más cosas: cuándo está justificada la violencia, qué huellas llevan las víctimas o qué estarías dispuesto a hacer por alguien a quien amas. Tiene dos narradores que se van alternando: Alexis Rodón, un exmosso expulsado por maltrato a un sospechoso, y Teresa Olivella una mujer que arrastra un pasado terrible e intenta sobrevivir con una máscara de payasa. Como siempre, Andreu Martín es un maestro.






