

Reparto: Russell Crowe, Rami Malek, Leo Woodall, Michael Shannon, Richard E. Grant, John Slattery
Película que recrea el juicio de Nuremberg y todos los pasos previos que hubo que dar para su
celebración.
Me ha gustado mucho. Es una película de una fuerza interpretativa impresionante y un guión
muy cuidado que invita a la reflexión.
La peli nos muestra la dificultad inicial para acometer un juicio de estas características al no
haber legislación internacional que posibilitara enjuiciar a criminales fuera de su país.
Frente a voces que se alzaban para que sencillamente se les ejecutara, se decide someterlos a
un juicio que mostrara al mundo la autoría confesa de los terribles hechos. Pero ello suponía
enfrentarse al riesgo de que los criminales ganaran en el terreno dialéctico a través de su
astucia, arrogancia, egolatría y habilidad y pasaran a convertirse en mártires.
Russell Crowe en el papel del mariscal Hermann Göring, el destinado a ser sucesor de Hitler,
está brillante. No lo está menos Rami Malek, al que vimos encarnar de forma brillantemente a
Freddie Mercury en Bohemian Rhapsody, en esta ocasión encarnando a Douglas Kelley
psiquiatra americano encargado de adentrarse en la personalidad de los siniestros personajes
que van a ser juzgados para enfrentarlos a sus debilidades.
Toda la peli nos brinda momentos brillantes de pulso argumental entre ambos personajes.
Me asalta la duda de si poner ahora el foco en el holocausto no resulte en estos momentos un
balón de oxígeno para Israel . Sin embargo la reflexión final del psiquiatra que a partir del
conocimiento profundo de la personalidad de los dirigentes nazis, plantea que no eran
diferentes al resto, y que es muy posible que los hechos se repitan auspiciados por cualquiera
con ansias de dominación ( posicionamiento que le restó mucha popularidad en EEUU),
retrata y pone el foco sobre TRUMP, NETAYANHU y todos los señoros de la guerra .
A diferencia de entonces en que los horrores del holocausto no fueron conocidos en el mundo
hasta que los aliados llegaron a liberar dichos campos, hoy asistimos diariamente al horror
televisado y sin embargo , el horror continúa.
