Me acabo de dar cuenta de que confundía a Ledicia Costas con Leticia Sánchez Ruiz y esta reseña hablaba de una obra anterior de Leticia Sánchez. Espero que Ledicia Costas nunca la leyera. Soy una taruga. Ledicia Costas escribe, sobre todo, literatura infantil y es amiga del Hematocrítico, con lo que yo debería besar el suelo por donde pisa y no confundirla con nadie. Entonado el mea culpa, sigo con la reseña. Esta novela nos presenta a Emma, una mujer que arrastra una trauma desde la infancia: su hermana murió atropellada cuando estaba con ella. Su vida amorosa ha sido también difícil y llega al pequeño pueblo de Merlo huyendo de una historia que le pesa. Ha conseguido un contrato en una Universidad para dar clases de Derecho. Pero lo que pretendía ser un retiro apacible se tuerce casi desde el principio. En Merlo desparecieron dos niñas veinte años atrás y eso ha dejado una huella permanente en sus habitantes. Casi sin quererlo, Emma se va metiendo en la historia y relacionando con sus protagonistas, lo cuál puede ser peligroso. Me encanta cómo describe la autora los paisajes, los climas y las emociones. Cada personaje tiene una historia y todas tienen interés. Merece la pena.
Pues precisamente por eso conozco a Ledicia Costas y soy tan fan de su prosa y sus personajes, porque en casa hemos leído casi todos sus libros infantiles y juveniles, que son una maravilla. Cuado supe que publicaba su primera novela para adultos, allá que me fui a leerla y, además, vino a Barcelona a presentar, así que aproveché para que me firmara algún librito de la peque de la casa . Ledicia es un encanto y hasta le hizo ilu firmarnos «La senyorte Bubbles» en catalán :-)))
«Infamia» me gustó y la reseñé, y coincido contigo en señalar el buen trabajo de los personajes y sus respectivas historias. Besos.
Pues sí, Mónica, pese a mi mala cabeza y mi lío con las Leticias, he disfrutado de esta novela y pienso seguirle la pista.