Hacía tiempo que no leía nada de espías. La verdad es que, quitando a Le Carré, no es un género que me llame mucho la atención. Mick Herron ha resultado ser un descubrimiento. Jackson Lamb y sus subordinados trabajan en lo que extraoficialmente se llama "La casa de la ciénaga". Ahí van a parar todos los espías que por uno u otro motivo han caído en desgracia: perder un documento importante, fallar en un ejercicio de evaluación, beber demasiado. Ese grupo forman los caballos lentos, a los que solo se confían tareas burocráticas. Pero de pronto se produce el secuestro de un joven al que sus captores amenazan con decapitar en directo en internet. Por casualidad se verán mezclados ese grupo de desencantados y demostrarán que no son tan lentos como parecen.Los personajes están bien dibujados y la trama resulta muy dinámica. Además, la he entendido, lo que no siempre me pasa con Le Carré. Si os va el género, es una buena opción.
